miércoles, 22 de diciembre de 2010

Primera Promocion De Abogados (UNERG)

Daniel R Scott

A la Sección 13 y a todos los graduandos del Area, hoy Abogados.

Me levanté muy temprano, antes de despuntar el alba, con las estrellas aún brillando en el cielo silencioso. Es el 14 de diciembre del año en curso. En verdad me costó un poco dormir, pendiente de los acontecimientos pronto a sucederse ese día. ¿Que tal avanzaran las próximas horas, que sorpresa nos traeran? "Un acto de grado no es cosa de todos los días" pensaba en la soledad de mi habitacion. "Y mucho menos si se trata de una primera promoción." Sin lugar a dudas se trata de una fecha memorable, de esas que se graban mejor en el corazon que en la tinta y el papel.

El amanecer me sorprendió leyendo ( para distraer la mente de las emociones que ya se agolpaban en el pecho ) "Los Pasos Perdidos" del escritor cubano Alejo Carpentier. Cierro el libro y sonrio a solas. ¿No debería mas bien estar leyendo algún tratado de Derecho? Es el deber ser, pero ¿qué le vamos a hacer? Soy adicto y aficionado a la litaratura y a la novela. No puedo negar mi esencia. Poco después el espejo de la habitación me devolvia la imágen de un hombre vestido de traje azul con corbata de franjas azules, rosadas y blancas. "Esas corbatas estan de moda" me asegura mi hermana Maria Eugenia. ¡Vaya la alquimia que operó en mí esta indumentaria! Y en mi dedo el oro tallado de figura alegórica. De aqui a poco estaré en el Domo Olimpico, juntos con muchos otros de mi igual condición. Sucede, ya sin más preámbulo, que hoy se gradua, en acto solemne e histórico la Primera Promoción de abogados 2005-2010 "Dr. Luis Enrique Gallardo" Y allí he de estar yo.

Y aqui estoy al lado de muchos más, en el riguroso negro de la toga y el birrete, en la impaciente espera del titulo tan soñado y tan luchado. Ya hicieron acto de presencia las autoridades universitarias y el claustro de profesores. Leugo del protocolo y la formalidad van pasando uno a uno todos los graduandos, dichosos, con el corazon henchido de logros y porvenir. ¿No son todos los que pasan adelante en busca de sus laureles los "PASOS QUE SUEÑAN CON CAMINOS" de los que habló José Carrero Mejías hace ya más de treinta años? Mi querido profesor de Latín supo esculpir en verso críptico los sentimientos de esta nueva generación de graduandos. Y ciertamente para la mayoría que marcha orgullosa, la obtención de este titulo que los acredita como abogados de la Republica no es el final del camino, sino el primero de muchos pasos, el primer tramo de un largo camino que no solo le llevará a la vital autorrealizacion individual, sino tambien al engrandecimiento de esa nuestra patria que tanto se lo merece. Ya muchos hablan de post grado y especializaciones, y otro más allá asegura que ofrendará su carrera a las personas con discapacidad y me anima publicamente a que yo haga lo mismo. Uno se pregunta: ¿Estaremos a la altura de las posibilidades y responsabilidades que se nos confió? ¿Sabremos honrar con nuestro noble accionar a aquellos que invirtieron sus energías fisicas, mentales e intelectuales para que fuesemos lo que hoy somos? Pido a Dios que asi sea, y que al final del camino podamos decir: "no corrimos en vano." Eso le pido a ese Dios cuyo trono es "el derecho y la justicia." ( La Biblia )

Finalmente el maestro de ceremonia pronuncia mi nombre. La solemnidad del momento me tiene algo aturdido y con resaca. Estoy ebrio con el vino del momento. El maestro de ceremonia vuelve a hablar y dice algo como: "Con la venia de las autoridades universitarias le impondrá la medalla el profesor Andrés Scott." Se trata de mi sobrino o hermano, es lo mismo. Forma parte del cuerpo de profesores de la Universidad. El me animó y casi obligó a iniciar esta carrera y gracias a su empeño hoy cosecho la simiente madura y dorada. Su natural entusiasmo encendió el mio. Me coloca la medalla y me abraza. Pienso decirle, "tu pusiste la primera piedra de este logro", pero no digo nada. Él en cambio me dice: "Mi abuelo te manda a decir que se siente orgulloso de ti." Y muy cierto es que pense con tristeza cuan bueno hubiera sido que papá presenciara este momento. Pero mamá, en alguna parte de este recinto, pese a su edad y debilidad, me ve y se siente feliz. Meses atrás comentó, en una comprensible exageración maternal: "Solo pido vida para verte graduado." Y esta aqui, pese a lo forzado que es para ella.

Yo enarbolo con vigor el título para que ella lo vea.

15 de Diciembre de 2010

El Motor de aire desafía la segunda Ley de la Termodinámica. Invento de un guariqueño.